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Cómo calibrar la batería de un móvil (y por qué deberías hacerlo).


Los smartphones contienen componentes durables en el tiempo como los procesadores, las pantallas o las cámaras, pero hay un componente en su interior que se degrada con el tiempo, y que en ocasiones presenta problemas a la hora de funcionar como es debido. Hablamos de las baterías, tanto las fijas como las intercambiables.

La carga de la batería de nuestro teléfono móvil se calcula en base a una serie de algoritmos que el sistema ejecuta y que se basan en la capacidad de la batería, el tiempo que la hemos estado cargando y el punto máximo de carga, que se alcanza pasado un tiempo. En cuanto alguno de estos factores falla, podemos encontrarnos con una desviación en los cálculos y, por tanto, tener ante nosotros una batería descalibrada. Veamos cómo solucionarlo pero antes, por qué es importante solucionarlo. Así pues, ¿cómo calibrar la batería de un móvil?

¿Por qué es conveniente tener la batería calibrada?.

En ocasiones puede ocurrir que nuestro móvil nos muestre un nivel de batería que no se corresponde con la realidad, y por eso puede que se apague inesperadamente cuando minutos antes aseguraba tener varias horas más de autonomía. No siempre tenemos un enchufe a mano ni una batería extra, o una externa, a mano. Por eso, si no queremos tener un móvil apagado en el bolsillo cuando más lo necesitamos, es conveniente que el indicador de batería sea lo más fiable posible.

No confiéis en apps que prometen calibrar la batería, no funcionan.

Mantener la batería calibrada no sólo es beneficioso para nuestro día a día, a fin de no quedarnos colgados en momentos de necesidad. También es saludable para la propia batería, pues conocer sus niveles nos ayudará a mantener siempre un nivel óptimo de carga. Nuestra recomendación, y así lo reflejamos en [este artículo sobre los mitos y leyendas de las baterías móviles](las baterías trabajan con menos estrés cuando su nivel de carga se sitúa entre el 40 y el 80%), es que el nivel de la batería se mantenga entre el 40% y el 80% de su carga para evitar un estrés innecesario. Y para lograr ese objetivo, debemos tener frente a nosotros un indicador real y fiable. Para ello, lo mejor es tener la batería siempre bien calibrada.

Una recomendación que os hacemos es que no confiéis en aplicaciones que prometen una calibración de la batería. Suelen estar presentes en todas las tiendas de apps para móviles, y su funcionamiento es desconocido pero lo que os podemos asegurar es que no ayudan a calibrar la batería. Suele tratarse de apps fake colocadas en las tiendas por diversos motivos. No confiéis en ellas, lo mejor para calibrar una batería es realizar el proceso nosotros mismos.

¿Cómo calibrar la batería de un iPhone?.

El proceso de calibración de una batería es prácticamente idéntico independientemente del modelo de móvil que tengamos entre manos, pero como cada maestrillo tiene su librillo, separaremos a los iPhone de Apple del resto por tener instrucciones específicas de calibrado ofrecidas por la propia compañía de Cupertino. Así pues, esto es lo que recomiendan hacer desde Apple para calibrar la batería de un iPhone. Un procedimiento que, por cierto, recomiendan hacer una vez al mes.

  1. Debemos cargar el iPhone por completo, hasta que el indicador de batería nos marque el 100% e incluso dejarlo un poco más, por si el descalibrado afectase al límite superior de carga.

  1. Una vez cargada la batería al 100%, debemos dejar que se descargue por completo. Lo recomendable en este caso es utilizarlo normalmente, o incluso aplicarle una carga de trabajo más alta de lo habitual a fin de lograr la descarga en el menor tiempo posible.

  2. Con la batería a cero, y el teléfono apagado, lo dejaremos reposar un tiempo que Apple estima entre 6 y 8 horas. Se supone que durante ese tiempo, la propia batería debería liberar el pequeño exceso residual que pueda quedar tras las últimas cargas.

Apple es muy específico con el tiempo de carga y espera. Siempre entre 6 y 8 horas.

  1. Pasado ese tiempo de espera, aplicamos una nueva carga al iPhone que durará el mismo tiempo que lo hemos tenido en reposo. De seis a ocho horas de carga, preferiblemente apagado o en modo avión para que el teléfono no consuma apenas energía durante el proceso.

  2. Una vez completado ese tiempo de carga, encendemos el iPhone si lo teníamos apagado, o lo apagamos para volver a encenderlo en caso de haberlo cargado encendido, y lo hacemos pulsando el botón Home junto al botón de encendido.

  3. En cuanto el iPhone haya arrancado, la batería debería estar perfectamente calibrada y volver a mostrar los correctos niveles de carga en cada momento. En caso de dudas, podéis consultar las instrucciones de Apple que podemos encontrar en su página web.

¿Cómo calibrar la batería de un móvil de cualquier otra marca?.

Una vez nos salimos de los estrictos pasos recomendados por Apple en cuanto a tiempos de espera, el resto de móviles no tienen unas normas específicas para que se calibren sus baterías. Para ellos, utilizaremos un método más general que puede aplicarse a cualquier marca de teléfono y batería, un proceso que se recomienda se realice cada dos o tres meses, aproximadamente.

Si tenemos baterías externas, también podemos calibrarlas. Descargándolas dentro del teléfono y cargándolas con su cargador externo correspondiente.

En el caso de contar con teléfonos a los que les podamos extraer la batería, y si tenemos baterías de repuesto, podremos repetir el proceso tantas veces como consideremos oportuno para calibrar cada batería que tengamos en nuestro poder. Aunque podremos realizar los procesos de carga en el propio cargador externo, y no en el teléfono, las descargas de la misma sí tendrán que ser con las baterías insertadas en sus terminales. Empecemos con el proceso general de calibración de una batería de móvil.

  1. Conectamos el móvil al cargador, o la batería a su cargador externo, hasta que la carga llegue al 100%. De nuevo, esperaremos un poco más para asegurarnos de que se alcanza la totalidad de la carga. Es mejor prevenir que curar.

  2. En cuanto carguemos la batería por completo, la insertamos en el teléfono, o desconectamos el teléfono de la corriente, y lo utilizaremos hasta que la batería se descargue en su totalidad. Deberemos forzar a que el teléfono se apague y no apagarlo cuando quede un 1% o un 2%. Hay apps que nos permiten descargar la batería de forma más rápida como AnTuTu Tester, disponible en Google Play para Android. Recomendación: los juegos pesados y los contenidos multimedia como películas o series son los que más rápidamente consumirán vuestra batería.

  3. Esperamos al menos cuatro horas con el teléfono completamente descargado para que la batería libere la energía residual que puede haber quedado tras la última carga.

  4. Una vez consumido ese tiempo, volvemos a conectar el teléfono al cargador, o introducimos la batería en el cargador externo, y lo llevamos de nuevo hasta el 100% de carga. Como hicimos anteriormente, esperamos un poco más tras haberse cargado.

  5. Si hemos completado los pasos correctamente, la batería de nuestro teléfono debería volver a estar calibrada. Lista para otros dos o tres meses de uso sin problemas hasta la próxima calibración.

¿Qué puede causar que mi batería se descalibre?.

Como hemos comentado anteriormente, el porcentaje de batería disponible se calcula en base a una serie de algoritmos que están insertados en cada sistema operativo, pero no son completamente inmutables ya que dependen de distintos factores. Determinados usos del móvil pueden causar que la batería se vaya descalibrando pero, avisamos, es prácticamente imposible impedir que esto ocurra. La calibración se hace necesaria cada cierto tiempo.

Lo peor para la vida de una batería son los aumentos de temperatura, y ahí entran las cargas rápidas, la carga inalámbrica y el exceso de tiempo de carga.

Por ejemplo, mantener el móvil conectado cuando la batería ya está cargada al 100% puede causar un aumento de temperatura de ésta durante más tiempo del recomendado. Eso causaría una degradación temprana de la batería y la consiguiente descalibración. Las cargas rápidas también aumentan la degradación, por lo que se recomienda usar la carga normal, más lenta, siempre que nos sea posible. También hay aumento de temperatura con la carga inalámbrica.

Estos datos, además de otros mitos y leyendas sobre las baterías, están recopilados en este artículo que publicamos en Xataka Móvil en su momento. Confiamos en que este artículo os sea de ayuda a la hora de mantener el indicador de la autonomía siempre en su punto óptimo, nadie quiere sorpresas en el día a día, y en eso el buen estado y calibración de la batería de nuestro móvil puede ser fundamental.

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