Bacterias, hongos y enfermedades: por qué deberías dejar de compartir tus auriculares.
Seguramente, en algún momento de tu vida, hayas compartido los auriculares con alguna persona. Es un gesto amable e inocente que, a su vez, puede ser más perjudicial de lo que crees. Es muy bonito ir en el autobús y dejarle un auricular a tu acompañante para que los dos podáis escuchar música o ver una película, pero no es tan sano como podría parecer en primera instancia. Corres el riesgo de infectarte con bacterias, hongos y enfermedades.
Cada persona tiene una flora bacteriana única en la cera de sus oídos que convive con nosotros en perfecto equilibrio. Cuando compartes unos auriculares compartes también tu cera, es decir, tus bacterias, con otras personas, corriendo así el riesgo de romper dicho equilibrio, tanto en la otra persona como en ti mismo. ¿Y qué puede provocar esto? Pues, sin ir más lejos, una infección.
Según Linda Dahl, otorrinolaringóloga neoyorquina, el cerumen que producimos en nuestros canales auditivos tiene funciones antisépticas, y nos protege de posibles infecciones. Hasta aquí todo correcto. El problema viene cuando compartes auriculares con una persona que no sabe que tiene un infección por hongos. Al usarlos, esta persona deja su cera del oído en el auricular que, posiblemente, te vuelvas a poner tarde o temprano sin limpiarlo excesivamente bien. ¿El resultado? Tú también cogerás los hongos y te infectarás. No es que compartir auriculares sea peligroso, porque no lo es, pero nunca sabes si la otra persona puede ‘pegarte algo’.
Ante la duda, limpieza.
Como siempre se dice, mejor prevenir que curar. Cuando compartas auriculares, límpialos concienzudamente con alcohol. Con que lo hagas una vez por semana está bien. Eso sí, intenta no abusar del líquido, porque una cantidad excesiva del mismo puede dañar los auriculares y dejarlos inservibles. Lo mejor es usar un pañito, humedecerlo en el producto y frotar bien los auriculares.
Si tus auriculares son de silicona lo vas a tener más complicado. El propio material del que están hechas las gomillas es más propenso a retener cera, ergo bacterías y hongos. Si tus auriculares son de este tipo, lo mejor es que no los compartas. Si ya los has compartido y quieres asegurarte, lo mejor que puedes hacer es quitar las almohadillas de los auriculares y meterlos en un vasito con alcohol rebajado con algo de agua durante unos minutos.
Lo que necesitas.
Muchas veces tienes que compartir auriculares porque tu móvil solo tiene una ranura jack de 3.5 mm, y a veces ni eso. Si tienes puerto de auriculares, lo que tienes que comprarte es un extensor. Gracias a este cable, que vale 7 euros, podrás enchufar dos auriculares y evitar posibles infecciones. Fácil, sencillo y barato. Aquí tienes el recomendado por Amazon.
Fuente: Andro4all.com
